Estudiantes de San Luis descendió de la B Nacional y jugará el próximo Torneo en la categoría Federal A, la tercera categoría del fútbol argentino. El descenso se da tras las victorias del Deportivo Morón ante Sarmiento de Junín y de Quilmes ante Atlético Rafaela, los dos equipos que se volvieron inalcanzables para Estudiantes.
El fútbol de San Luis pierde una plaza tan importante en el ascenso después de 3 años y medio en la categoría, ascenso fruto de la ambiciosa administración del empresario Carlos Ahumada.
Con la llegada a la Presidencia del Club del empresario Carlos Ahumada Kurtz en noviembre de 2011, se obtuvieron los logros más importantes en la historia de la institución, tres ascensos de categoría en tres años.
La administración de Ahumada logró el ascenso del Argentino C al Argentino B, en menos de seis meses, en el siguiente torneo, logró el ascenso al Argentino A, y en noviembre de 2014 logró el ascenso al Nacional B donde lo dejó Ahumada al momento de su renuncia como Presidente en octubre de 2016.
Vuelve a la memoria el final del partido donde se ganó el ascenso al Argentino A, Alfredo Molina y Joaquín Bustamante lloraban en pleno escenario de Catamarca, se abrazaban y abrazaban y agradecían a Ahumada por haber aceptado desembarcar en el Coliseo. Lo mismo hacía uno a uno, casi en procesión, el resto del grupo de dirigentes que acompañaron al equipo.
Mientras, el empresario también se fundía en lágrimas. "He vivido un título con el León de México, pero esto es increíble. Gracias a todos", dijo.
Como olvidar el cariño de la hinchada, miles de simpatizantes del Verde coparon el aeropuerto el domingo 30 de junio de 2013 para recibir a los campeones y ascendidos al Argentino A. Los jugadores festejaron con su gente y dieron la vuelta olímpica en su cancha. Quienes estuvieron en el aeropuerto no recuerdan haber visto algo así.
El 2 de noviembre de 2014, se logró bajo la administración de Carlos Agustín Ahumada Kurtz un nuevo sueño. Al fin un equipo puntano se metió en los primeros planos del fútbol nacional. Fueron 94 años de pelea. Por eso el 2 de noviembre quedará grabado en la memoria de todos los fanáticos de Estudiantes. El anhelo de todos, el poder estar en los primeros planos del fútbol argentino, el albiverde lo coronó al vencer 1-0 a Andino de La Rioja y así conquistar el tan ansiado ascenso a la B Nacional tras una gran campaña en el Federal A.
Otro logro a destacar fue la visión que tuvo la Presidencia de Carlos Ahumada para integrar a los chicos al deporte, además de brindarles la oportunidad de tener una vida más sana, disciplinada dentro de un ambiente de compañerismo forjado en los mejores valores de la sociedad.
Asimismo, las divisiones inferiores del plantel fueron consideradas en un plan de desarrollo global del club para formar y promover a jóvenes deportistas de la provincia desde las divisiones inferiores y consolidar al equipo de primera división a fin de que llegara a las máximas categorías con grandes resultados, por mencionar uno, por primera vez en la historia de la institución participaron en torneos organizados por la AFA. No podemos olvidar la emoción de los chicos al enfrentarse a equipos como Boca Juniors e Independiente.
También se logró la participación del primer equipo en la Copa Argentina, donde los jugadores pudieron enfrentarse a los equipos de primera y jugarles de tú a tú, como en el enfrentamiento contra River Plate en agosto de 2015 en que le dieron la pelea hasta el último minuto, como un grande.
Estos grandes resultados fueron parte de un plan integral, cabe destacar que la administración Ahumada invirtió mucho en la infraestructura de la institución lo que forjó la base para seguir avanzando en lo deportivo.
Resulta lamentable que en dieciocho meses la actual administración lograra acabar con todo lo obtenido bajo la Presidencia de Ahumada.
Hoy los logros que concretaron los sueños del pueblo albiverde, han sido suplantados por la desolación, la frustración y la impotencia.
Hoy ante la destrucción que rodea a Sportivo Estudiantes, miles de hinchas viven con el corazón destrozado el temido descenso de categoría.
Hoy no hay esperanza, los sueños están rotos.